Skip to main content

Síndrome postvacacional

Vivimos inmersos en un contexto social que patologiza la vida. En lo que nos ocupa en esta entrada nos vamos a referir al síndrome postvacacional. La famosísima depresión postvacacional es una etiqueta que ya se ha afianzado en el vocabulario popular. No es de extrañar en una época en la que tendemos a sobre-etiquetar todo, quizás en un esfuerzo de sentirnos comprendidos, quizás en un esfuerzo de sentirnos menos solos en nuestro sufrimiento o quizás por que el modelo imperante tiende a patologizarlo todo.

¿Existe el síndrome postvacacional?

Como toda etiqueta la depresión postvacacional no es más que un término que utilizamos para describir una condición o estado: tristeza, sensación de cansancio, disminución de la motivación, irritabilidad… Pero, ¿no será ésta una respuesta absolutamente normal y adaptativa a un cambio de contexto?

Las vacaciones (por norma general) suponen un contexto que nos posibilita el acceso a una amplia gama de reforzadores. Cuando volvemos a la rutina pasamos de un contexto que nos permite disfrutar de tiempo libre de preocupaciones y obligaciones laborales, cultivar relaciones sociales, horarios flexibles, actividades de ocio… a un contexto que limita nuestro tiempo de ocio, incrementa nuestras responsabilidades, tenemos horarios más rígidos, restringe nuestras interacciones sociales informales, nos sobrecarga, es precario y muy poco reforzante, además de tener que soportar los gritos del anormal del jefe.

Por tanto, la vuelta a la rutina puede suponer un bloqueo en el acceso a estímulos que nos proporcionan sensaciones agradables. Además, las vacaciones nos ponen en contacto con áreas de valor importantes para nosotros, por lo que su finalización puede vivirse como una pérdida importante y una ruptura en nuestro camino hacia una vida rica y valiosa. Por no hablar de que a la mayoría de las personas no les gusta su trabajo y acuden por obligación.

Por lo tanto, lo más normal ante esta situación es que nuestro organismo se active y nuestro sistema emocional se ponga en marcha para protegernos y mantener nuestro bienestar adaptándonos poco a poco a la vuelta a la rutina.

Síndrome postvacacional psicologos valladolid

Síndrome postvacacional psicologos valladolid

La tristeza como emoción protectora frente a la etiqueta de síndrome postvacacional

La tristeza es un emoción que invita a la reflexión, a retirarnos, parar y focalizar la atención en nuestra vida y nuestros anhelos. La tristeza te está dando una información valiosísima sobre aquello que has perdido o sientes como una pérdida, o sobre aquello que echas de menos y ahora ya no posees… La tristeza te está ayudando a mirar qué falla y, en consecuencia, emprendas acciones que te permitan avanzar hacia esa vida rica y valiosa.

Si hemos dicho que la vuelta de vacaciones puede vivirse como una pérdida y una ruptura de nuestro sentido vital, no es sorprendente, por tanto, que sea la tristeza (con sus sensaciones físicas características como el cansancio, la desgana y la apatía así como comportamientos característicos de ella como el llanto) la emoción predominante.

Conclusión 1: el síndrome postvacacional no existe.

Conclusión 2: ¡NO! No estás deprimido o deprimida, ni enfermo o enferma, ni roto o rota… estás respondiendo de la manera más adaptativa posible a unas circunstancias contextuales determinadas.

5 claves para afrontar este «síndrome postvacacional»

  • Vuelve poco a poco. No te sobrecargues ni comiences al 100%. Y si te exigen algo así, intenta establecer límites dentro de las dificultades que plantea el contexto laboral.
  • No alargues tus jornadas de trabajo porque es tiempo que te quitas de vida y te puede sobrecargar.
  • Necesitas tiempo de ocio. El trabajo puede resultar absorbente así que no te dejes arrastrar por esto. El gym, tu pádel, el cine, la lectura, tu perrito…
  • Rodéate de personas que actúen como amortiguadores emocionales. Familia, amigos, planes…
  • Cuando estés fuera del trabajo desconecta no monopolizando tus conversaciones y hablando sobre todo lo que NO sea el curro.

 

Artículo escrito por Elisa Vegas Sáez, Psicóloga Sanitaria CL05337, Máster en Psicología General Sanitaria y especialista en regulación emocional, sexualidad y relaciones afectivas.

Si necesitas un refugio en la tormenta, puedes comprar mi libro «Un viaje hacia el amor (propio)» que te ayudará para que dejes de pelearte contra tus emociones y a manejar los ataques de ansiedad.

Soy David, Psicólogo Sanitario y CEO de David Gómez | Clínica de Psicología Avanzada. Mi equipo y yo somos especialistas en regulación emocional, autoestima, sexualidad, trastornos de la conducta alimentaria, relaciones afectivas y psicología deportiva. Mediante las Terapias Contextuales y de 3ª Generación ofrecemos la mejor terapia psicológica para que puedas sentirte en un lugar seguro, aprender a regular tus emociones y lograr tu bienestar psicológico con la máxima eficiencia. Puedes encontrarme en Instagram y pedir tu cita mediante Whatsapp al 675556971.